A estas horas...
Ya ha pasado la tarde de domingo. Son raras las tardes de domingo, sobre todo si son de resaca. Dan que pensar a los que tenemos la suerte de pasarlas ociosos de vez en cuando. Ahora son las diez y media aquí en Sevilla. En Ramala es una hora más tarde. Deben ser las cinco y media de la tarde en Buenos Aires. Y en Sydney acabará de despuntar el alba. Hay luna llena. En el invierno argentino habrá a estas horas mucha gente tomando mate en los parques buscando un rayo de sol que les conforte. Las cafeteras estarán humeando en Australia antes de ir a trabajar. En las camas palestinas se dormirá como casi siempre con intranquilidad. Y aquí los 33ºC son lo que no nos deja dormir. A mí hoy me preocupa poco lo que suceda mañana. Lo más probable es que todo transcurra con normalidad. Me levantaré tarde, o no, desayunaré, regaré las plantas, haré alguna gestión, arreglaré un poco la casa, haré la comida... en fin, lo de todos los días en que no hay que currar. A Garib esta noche de insomnio ya...